jueves, 4 de noviembre de 2010

LAS I JORNADAS DE BANCOS DEL TIEMPO REUNIRÁN EN MÁLAGA A 192 PROFESIONALES Y USUARIOS DE ESPAÑA Y EUROPA

El Área de Igualdad del Ayuntamiento de Málaga ha presentado esta mañana las I Jornadas BDT en Andalucía "Intercambiando Experiencias" que se celebrarán en Málaga los próximos días 10 y 11 de noviembre del 2010 y que contarán con la presencia de representantes de bancos del tiempo a nivel comarcal, provincial, nacional e internacional. Al acto han asistido la directora general del Área de Igualdad del Ayuntamiento, Gemma del Corral, acompañada por José Antonio Naveros, presidente de Asociación Arrabal, y María Nieves Gómez Crespillo, presidenta de Federación Ágora.

Estas Jornadas, en las que se han inscrito un total de 192 personas, suponen un punto de encuentro entre profesionales y personas usuarias, que pretende convertirse en un foro permanente de debate para conocer como funcionan los diferentes sistemas de intercambio que operan en España y Europa, favoreciendo la cooperación entre todos los Bancos del Tiempo. El proyecto, impulsado por el área de Igualdad del Ayuntamiento de Málaga, forma parte de la Iniciativa Urbana: Arrabales y Carretería y está cofinanciado por la Unión Europea a través del Programa Operativo FEDER Andalucía (Fondo Europeo de Desarrollo Regional), con la colaboración del Área de Participación Ciudadana, Inmigración y Cooperación al Desarrollo del Ayuntamiento de Málaga. La materialización de la idea se lleva a cabo gracias al trabajo de dos entidades sociales malagueñas: la Asociación Arrabal-AID y la Federación Provincial de Asociaciones de Mujeres Ágora.

Con esta iniciativa, el Ayuntamiento de Málaga pretende fortalecer las relaciones humanas y fomentar la cooperación de los habitantes en la zona PEPRI del Centro Histórico, que comprende barrios populares como Capuchinos, Molinillo, Cruz Verde-Lagunillas y Ollerías. El eje central del BdT Málaga son los intercambios de servicios y habilidades entre personas, otorgándose a cada uno de ellos el mismo valor a través de cheques de tiempo que canjean las ofertas por las demandas. Cada usuaria o usuario posee una cuenta bancaria cuyo saldo depende del número de horas invertidas en la prestación de servicios y las gastadas en el consumo de servicios demandados.